miércoles, 9 de enero de 2008

Familia cristiana

El 30 de diciembre del año pasado, tan lejos ya, todos sabeis que hubo una concentración en la madrileña plaza de Colón de apoyo a la familia cristiana. Pero sólo a esa. A la madre soltera no (olvídate de ayudas). Ni a los padres divorciados. Todos sabemos que eso es pecado. Por supuesto que de los matrimonios homosexuales ni hablamos. Eso va contra natura e incluso puede que sea una enfermedad, como el cáncer, pero social. Allí estaban las familias felices, con sus hijos, enarbolando mi bandera nacional (deduzco que sólo se apoya a la familia cristiana pero española) y portando santos y estampas. Y los cardenales y demás jerarquía eclesiástica. Si hubieran llamado a Guiness, el de los records, no el irlandés que tan bien cae, hubieran sido inscritos en su libro como la misa más grande del mundo. Posiblemente. Todo esto no me parece mal, la democracia abarca todo lo casi abarcable. Pero llega la homilía de los prelados a los que nunca se les vio en la calle contra el terrorismo y proclaman que esto se hunde, que la democracia peligra, que la familia tradicional está amenazada. Y yo sin enterarme. Es el fin de la cultura occidental tal y como la conozco. Miré la fecha del periódico. O era día 28, que no, o había caído en mis manos un ejemplar de 1935. Tampoco. Entonces llegué a la conclusión de que la Iglesia oficial de mi país es una máquina obsoleta, lenta, que no admite que en 2008 la sociedad ha cambiado. Que gracias a Dios (sí, gracias a Dios) en España una pareja que se quiere o simplemente porque quiere puede contraer matrimonio en igualdad sin etiquetas semánticas de primera o segunda categoría. Que hay mujeres que quieren tener un hijo pero no las apetece compartir su vida con otra persona. O también hay hombres que piensan lo mismo. Y yo no conozco, que soy un ignorante, ningún proyecto de ley que margine o prohíba la familia tradicional. Lo de las escasas ayudas es otro tema que no viene al caso, no creo que sea por poner trabas. Y principalmente, y otra vez doy gracias a Dios, ya no vivimos en aquel nacionalcatolicismo en el que se sentían tan cómodos. O en Polonia. O en Irlanda, donde abortar es delito. Y cada vez influyen menos en la sociedad civil, cada vez más aconfesional y laica en distinta proporción. Ciertamente, si la democracia estuviera al borde del abismo, querría ver yo al que da el último empujoncito... con lo fácil que es dejar que yo actúe en conciencia, que muchas gracias, pero no necesito que salven mi alma. Ya decido yo, si eso.


6 comentarios:

Todo a Cien dijo...

Tienes toda la razón en eso de que nunca he visto a un puñetero cura apoyando una manifestación contra ETA. Eso no rompe la democracia??? ni la destruye???. No creo que las mujeres madres y solteras quieran ayudas.Con un poquito de cariño sería suficiente. Gracias a Dios (Si ,a Dios) que al menos la sociedad en general no es tan obsoleta como los cuatro ruines que acuden a esas manifestaciones por el qué dirán.

Pequeña Desorden dijo...

Que gracia me hizo leer "que las ayudas económicas sólo deberían ser dadas para niños que nazcan en el lugar adecuado", oponiéndose de este modo la iglesia a que las madres solteras recibiesen cualquier tipo de ayuda económica.
Más gracia me hace leer TODOS LOS DÍAS en las marquesinas del metro de Tribunal el slogan de la nueva Revista "21" para el cristiano de Hoy: "Ningún Cristiano usa preservativo".
Gracioso también fue que hasta el año pasado (2007, s.XXI) no admitieron que los niños no bautizados van al cielo (ejem) y que el purgatorio (notición) NO EXISTE.
Y ya me parto cuando se toca cualquier tema relacionado con la homosexualidad.
Y lo peor de todo, no es este despiporre, que ellos pueden decir misa (y nunca mejor dicho) , lo peor es la gente que les sigue y el daño que pueden llegar a hacer.

Twat Boy dijo...

Yo tampoco creo que las madres solteras necesiten ayuda, pero nunca viene mal. Y espero que la sociedad no les apoye, porque creo que son más de los que pienso.
Estoy de acuerdo contigo Pequeña Desorden en el daño que pueden llegar a hacer a sus propios fieles, peligro de muerte incluso si no usan condones en sus relaciones sexuales, aunque siempre queda la castidad...

Twat Boy dijo...

Por cierto, Rouco fue elegido presidente de la Conferencia Episcopal, el ala dura y ultraconservadora de la Iglesia toma las riendas. Volverán a la carga contra el gobierno del PSOE si vuelven a ganar?

Unknown dijo...

En Italia tambien hemos tenido el dia de la familia, lastima q todos los politicos q han partecipado tienen amates, 3 o 4 ex mujeres o se encuentran periodicamente en los hoteles mas de lujo de Roma organizando fiestas a base de putas y cocaina...(eso es solo lo q se sabe...) aqui tampoco ni una palabra sobre el tema de ayudas a las familias...son todos teo-fascistas de verdad...besos

Twat Boy dijo...

Bienvenido graziano. Es inadmisible que traten de imponernos a toda la sociedad sus normas morales, sin respeto a las opciones individuales. Sí, el término teo-fascismo es el más adecuado.
Un saludo enorme.