lunes, 28 de diciembre de 2009

Consecuencias

Después de dos años de penurias económicas, más de cuatro millones de parados, que se dice pronto, después de que el capitalismo haya sobrevivido gracias al esfuerzo de los Estados que han inyectado dinero de todos, o lo que es lo mismo, dinero público, las consecuencias las vemos ya, poco a poco, una tendencia que se consolida. Primero que la sociedad sólo se moviliza cuando las cosas van bien. Es una paradoja, pero creo que es así. La gente se movilizó en masa contra la guerra de Irak, se movilizó ante las sedes del PP en 2004, se movilizó contra el terrorismo en repetidas ocasiones, se ha movilizado contra la masacre de Gaza... pero en momentos cuyo denominador común era la bonanza económica. Es decir, la pirámide de Maslow en su apogeo: cuando tengo cubiertas las necesidades básicas ya me ocupo y preocupo de temas más eleveados. Cuando mi preocupación es la de conseguir sustento, averiguar cómo se paga la letra del alquiler de este mes y del que viene poco tiempo tengo para protestar. Y es que si no no entiendo cómo con la situación económica que hay no hay manifiestaciones más a diario, sólo el 12 de diciembre convocada por los sindicatos, que ya era hora por otra parte. Bien es verdad que el gobierno palía la situación con las ayudas, bienvenidas sean, pero se puede exigir a los grandes partidos unidad de acción para sacarnos de esto cuanto antes, y no verlos en los infornmativos tirándose los trastos. Total, sociedad anestesiada. Y la otra tendencia es el resurgir de la clase obrera, lo que se llamó el proletariado. Porque hasta esta crisis todos éramos clase media, media-alta o media-baja, pero clase media. Pocos obreros quedaban en España, prueba de ello fue la mayoría absoluta de un partido de derecha, alejado de las tesis obreras. Y ahora resulta que la crisis golpea a todos, aunque obviamente a unos más que a otros: directivos de bancos, obreros de la construcción, camareros, fontaneros y un largo etcétera. Las empresas atraviesan problemas, eso es evidente, y las soluciones son variopintas: ERE temporal acompañado de bajada de sueldo, echar más horas sin retribución, que es otra bajada de sueldo, inseguridad en el puesto de trabajo, por lo que trabajas más sin una justa retribución, lo que es otra bajada de sueldo. Consecuencia, todos rozando el mileurismo. Gente con formación específica que pasa de la treintena, que ya tiene experiencia laboral y que desempeña muy bien su profesión está viendo como su sueldo se ve mermado, se lo bajan de una u otras forma, y sin perspectiva de que esto cambie a mejor. Hay que ir quitándose de caprichos poco a poco, el dinero del sueldo ya no da tanto de sí... y cuando te creías de clase media ahora te ves de clase media-baja, y mañana te ves... en el paro o con sueldo de mil euros en el mejor de los casos.
No es que sea apocalíptico, es que es lo que estoy viendo... y lo peor es que los brotes verdes yo no los veo a mi alrededor.